Demasiadas viviendas
El Ayuntamiento de Jerusalén ha aprobado el pasado jueves una variación en el orden de demolición de las viviendas ilegales del término municipal.
Esto no parece noticia de clase alguna, pero hay que tener en cuenta en primer lugar que la mayoría del término municipal está formado por territorio palestino ilegalmente anexionado al Estado de Israel, y en segundo lugar que la política de demolición de viviendas es de tal índole en Jerusalén que ha provocado incluso la existencia de un Comité Israelí contra las Demoliciones de Casas (ICAHD, en sus siglas inglesas por Israeli Committee Against Houses Demolitions), formado por israelís activistas por la paz.
De acuerdo con la reciente resolución municipal, de la que informa el periódico israelí Haaretz, no se demolerá vivienda ilegal alguna en terreno privada hasta que se hayan demolido todas las viviendas ilegales en terrenos públicos.
Una explicación se hace necesaria. Resulta que la asociación de colonos judíos "Ateret Cohanim", construyó ilegalmente en terrenos privados de Jerusalén Este, en el barrio de Silwan, una casa de siete pisos en la que viven ocho familias de colonos, y a la que llaman Beit Yehonatan. Estos colonos manifiestan que su objetivo es "judaizar" Jerusalén Este. La construcción ha sido declarada ilegal por todas las instancias competentes, incluido el Tribunal Supremo de Israel, y se iba a demoler con carácter inmediato si no fuera por el acuerdo forzado por la mayoría derechista del Ayuntamiento de Jerusalén.
Conviene saber que la mayoría de edificaciones ilegales por razones urbanísticas se encuentran en terreno público, y que la mayoría han sido edificadas por palestinos, que serán los afectados por la prioridad de demoliciones acordada.
Completemos el panorama recordando que en la misma semana se ha acordado la construcción de 900 nuevas viviendas para judíos en dos distintos barrios palestinos de Jerusalén Este.
Demasiadas viviendas para la paz. Demasiadas viviendas en el camino opuesto a la paz.
Esto no parece noticia de clase alguna, pero hay que tener en cuenta en primer lugar que la mayoría del término municipal está formado por territorio palestino ilegalmente anexionado al Estado de Israel, y en segundo lugar que la política de demolición de viviendas es de tal índole en Jerusalén que ha provocado incluso la existencia de un Comité Israelí contra las Demoliciones de Casas (ICAHD, en sus siglas inglesas por Israeli Committee Against Houses Demolitions), formado por israelís activistas por la paz.
De acuerdo con la reciente resolución municipal, de la que informa el periódico israelí Haaretz, no se demolerá vivienda ilegal alguna en terreno privada hasta que se hayan demolido todas las viviendas ilegales en terrenos públicos.
Una explicación se hace necesaria. Resulta que la asociación de colonos judíos "Ateret Cohanim", construyó ilegalmente en terrenos privados de Jerusalén Este, en el barrio de Silwan, una casa de siete pisos en la que viven ocho familias de colonos, y a la que llaman Beit Yehonatan. Estos colonos manifiestan que su objetivo es "judaizar" Jerusalén Este. La construcción ha sido declarada ilegal por todas las instancias competentes, incluido el Tribunal Supremo de Israel, y se iba a demoler con carácter inmediato si no fuera por el acuerdo forzado por la mayoría derechista del Ayuntamiento de Jerusalén.
Conviene saber que la mayoría de edificaciones ilegales por razones urbanísticas se encuentran en terreno público, y que la mayoría han sido edificadas por palestinos, que serán los afectados por la prioridad de demoliciones acordada.
Completemos el panorama recordando que en la misma semana se ha acordado la construcción de 900 nuevas viviendas para judíos en dos distintos barrios palestinos de Jerusalén Este.
Demasiadas viviendas para la paz. Demasiadas viviendas en el camino opuesto a la paz.
Etiquetas: Afers Estrangers, Palestina, pau
0 Comentarios:
Publicar un comentario
<< Home