Pequeñas diferencias

No todo es igual, en absoluto, por eso existe en matemáticas el signo de desigual, que es el de la ilustración.

No todos somos iguales, en absoluto, existen diferencias entre unos y otros, quizá pequeñas diferencias dentro de la radical igualdad, pero que marcan situaciones desiguales.

Lo hemos podido comprobar estos dos últimos días en los periódicos.

En el País Vasco, una vieja señora, viuda de un teniente coronel asesinado por ETA, ha estado cuidando y alimentando personalmente, hasta el mismo instante de la muerte, a una anciana enferma de Alzheimer, madre del etarra 25 veces asesino Iñaki de Juana Chaos.

En Madrid, el 3 del corriente febrero, en el transcurso de la manifestación antigubernamental convocada por la AVT y presidida por el PP, algunos manifestantes corearon lo siguiente, en referencia al Secretario de Organización del PSOE: "Ay, Pepiño, Pepiño, Pepiño/ Ay Pepiño qué noble es tu fin/ Que la ETA nos mata, nos mata/ Ay, ¡qué coño!, que empiecen por ti."

Es quizá una pequeña diferencia de actitud, sólo unas pequeñas diferencias de percepción de la solidaridad, pero marcan claramente la desigualdad entre las personas decentes y las que no lo son.