La Comisión Constitucional ya cumplió

Hoy a mediodía, la reunión conjunta de la Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados y de la Delegación del Parlamento de Cataluña ha culminado sus trabajos, aprobando por mayoría de ambas partes el texto de Estatuto de Cataluña que se someterá a aprobación del Pleno del Congreso de los Diputados el próximo día 30 de marzo.

Lo ha hecho, por cierto, después de que el Tribunal Constitucional hubiera acordado no admitir a trámite el recurso que presentó el Grupo Parlamentario Popular para impedir la tramitación del Estatuto en las Cortes Generales, sin que ello haya sido suficiente para que el PP deje de insistir en la falsedad de que el Estatut modifica subrepticiamente la Constitución.

Se ha demostrado, una vez más, que el PP tiene convicciones tan firmes que nunca permitirá que la realidad le lleve a modificarlas.

La tramitación del Estatut sigue con los votos favorables de todos, excepto de la única diputada de Eusko Alkartasuna, Esquerra Republicana de Catalunya y el Partido Popular.

El PP ha justificado su voto negativo en los acostumbrados augurios de destrucción de España, de voladura de la Constitución, de opresión linguïstica, etc., pero hay que reconocer que ha añadido al repertorio clásico y machaconamente repetido algún elemento de novedad, que ha logrado llamar la atención de la sala. Por un lado ha inaugurado el proceso de deslegitimación del Parlamento de Cataluña, diciendo que sus diputados no estaban autorizados para aprobar el proyecto que aprobaron, mientras sí considera legítimas las firmas que pintorescamente recoge para un referéndum ilegal, también solicitado por el golpista Tejero. Por otra parte ha conseguido sorprendernos a todos enarbolando una nueva - o al menos hasta ahora desconocida - identidad de luchadores y resistentes contra el franquismo, que ha desatado una incontrolable hilaridad en la inmensa mayoría de los diputados y diputadas presentes. Sólo le ha faltado al Sr. Zaplana - sí, él mismo - exhibir un carnet de alguna Agrupación Guerrillera de los maquis antifranquistas.

Más dificil ha resultado a los asistentes entender, en todos los sentidos de la palabra, el discurso de ERC. Este partido ha trabajado intensamente en la elaboración del Estatut, y ha votado favorablemente un 85 por 100 del texto, pero ha decidido votar en contra porque considera que lo esencial está en el 15 por 100 restante. Resulta sorprendente tal posición cuando de un texto de 227 artículos, 25 disposiciones varias y un preámbulo, sólo se han producido 4 discrepancias entre el Parlamento y el Congreso, cuatro en el sentido matemático, no metafórico. Eso significa que salvo estos cuatro casos, que versan sobre tres temas concretos, se ha producido un acuerdo completo entre las Cortes Generales y el Parlamento de Cataluña, del que se desmarca ERC. El Sr. Carod ha intentado justificar su actitud recurriendo a una cita del President Francesc Maciá en el debate sobre el Estatuto republicano de 1932, que dijo "no podemos hipotecar a toda una generación de catalanes", pero ha intentado ocultar a los asistentes que Maciá justificó así su voto favorable al Estatuto, no el negativo, aunque algunos energúmenos le trataran entonces de traidor.

En definitiva, como ha dicho Manuela de Madre en su intervención en nombre del PSC, dirigiéndose a Carod, "los que están a favor suelen estarlo con matices, no se engañe, los que están en contra, sólo están en contra."